En las puertas de los hogares, comercios u oficinas es habitual encontrar instalados cerrojos de seguridad. Los cerrojos se utilizan para complementar la cerradura de la propia puerta, añadiendo un extra de seguridad ante ataques de bumping u otro tipo de manipulaciones que afecten a la cerradura. Muchas veces, incluso, su efecto es disuasorio, ya que su presencia implicaría la manipulación de otro elemento de seguridad en la puerta, retrasando la acción delictiva.
Estos dispositivos suelen estar formados por piezas: un pasador y un prisionero del pasador. La pieza que contiene al pasador, a su vez, presenta una cerradura para poder operar el cerrojo desde el exterior de la puerta, así como un mecanismo o botón que permite liberar y operar el cerrojo desde el interior de la puerta. Esta pieza se instala en la propia puerta, siendo necesario mecanizar la puerta para poder pasar el cilindro. El prisionero del pasador, como su nombre indica, se encarga de anclar el pasador, instalándose sobre el marco interior de la puerta.
La efectividad de estos equipos radica en su simpleza: para accionarlos simplemente se necesita una llave, pudiéndose abrir o cerrar como una cerradura tradicional. Sin embargo, este tipo de dispositivos también presentan algunas desventajas:
- Instalación profesional: debido a que tienen una parte que queda por fuera de la puerta y otra que queda por dentro, es necesario mecanizar la puerta para colocarlos. Su uso más extendido es en puertas de viviendas, que suelen ser blindadas o acorazadas, por lo que requieren de un profesional para su instalación.
- Reemplazo completo: en caso de pérdida de llaves es necesario cambiar por completo el cerrojo, ya que la mayoría de estos equipos no permiten sustituir el cilindro por tenerlo integrado.
- Disposición no oculta: si bien esto le aporta al cerrojo su carácter disuasorio, el hecho de tener la cerradura instalada por fuera de la puerta también revela su posición en esta, haciendo que sea más fácil acceder a él.
Watchman Door, compañía española con más de 6 años de experiencia en el sector del control de acceso, cuenta con una dilatada experiencia en el ámbito de la protección de activos inmobiliarios. Este fabricante, el cual busca continuamente la innovación y desarrollo de nuevas soluciones basadas en su propia tecnología, apuesta por la tecnología keyless, es decir, poder gestionar y operar todos los sus dispositivos sin necesidad de llaves, solo con un smartphone.
El cerrojo inteligente wBolt, se presenta como el caballo de batalla de esta empresa, no solo por su innovadora tecnología y desempeño, sino también por su completa integración con el sistema de intrusión Ajax, pudiéndose armar y desarmar con este sistema, además de gestionarlo con diferentes escenarios.
Actualmente, cada vez es más común gestionar los aparatos y equipos electrónicos que nos rodean con nuestro smartphone, así como encontrar versiones inteligentes de productos convencionales. En este aspecto, los cerrojos de seguridad no son una excepción.
Debido a su crítica posición y uso, estos dispositivos deben de contar con una serie de características que aseguren su correcto funcionamiento y la seguridad de las personas:
- Operación inalámbrica y manual: la principal cualidad de estos cerrojos es que se pueden operar desde un smartphone de manera inalámbrica, a través de comunicación Bluetooth. Además, algunos modelos también cuentan con comunicación ZigBee para conectarse a paneles de alarma de terceros. Sin embargo, adicionalmente a la comunicación inalámrbica, también deben de contar con un mecanismo físico que permita su accionamiento de manera manual, para poder gestionarlos en caso de fallo o de pérdida de alimentación.
- Apertura de emergencia en caso de pérdida de alimentación: desde el interior de la puerta, el cerrojo se puede operar de manera manual, pero desde el exterior no, al no disponer de una cerradura física. Por este motivo, en caso de que las baterías que lo alimentan dejen de suministrar la energía necesaria para su funcionamiento, el cerrojo debe de abrirse de manera automática para poder acceder por la puerta donde se encuentra instalado.
- Apertura de emergencia física en caso de fallo del motor: en el caso de que el motor que acciona el mecanismo del cerrojo fallase, o el propio mecanismo, este debe poder abrirse desde el exterior, que es el lugar más complicado para su manipulación. Debido a ello, estos equipos deben de contar con una serie de muescas en el pasador que faciliten a un profesional poder operar el cerrojo en una situación de este estilo.
- Compartición con terceras personas: debido a la falta de cerradura física en su exterior, estos equipos no pueden abrirse o cerrarse con llaves físicas. Por este motivo, estos cerrojos deben poder compartir sus permisos de apertura y cierre con terceras personas, como familiares, inviados o empleados temporales, a través de correo electrónico u otras aplicaciones de mensajería.
Además, estas características que deben presentar los cerrojos inteligentes subsanan las desventajas que muestras los cerrojos convencionales.
En conclusión, la gama de cerrojos inteligentes de Watchman Door disponible en Visiotech, es la mejor opción para complementar las instalaciones de control de acceso, así como para dotar a las viviendas, locales y oficinas de un extra de seguridad con una integración completa con el sistema de intrusión Ajax.