Las cámaras falsas presentan un aspecto similar al de las auténticas cámaras de videovigilancia, pero sin la capacidad de captar imágenes. Están formadas por el cuerpo, lente y soporte de una auténtica cámara de video pero sin la electrónica interna, para hacerlas más económicas, por lo que no resulta posible a simple vista diferenciarla de una cámara que esté funcionando. Disponen además de un LED rojo, que se activa conectando dos pilas AA en el interior de la cámara y que parpadea de forma intermitente, con lo que mejora la simulación.
Económicas y de sencilla instalación, pueden ser usadas como señuelo, instalándose a la vista y ocultando el verdadero sistema CCTV en un lugar oculto. De esta forma, en caso de robo los ataques se producirán contra la cámara simulada, mientras que las cámaras del sistema de videovigilancia estarán a salvo y captarán todas las imágenes sin ser descubiertos. También pueden ser usadas sin sistema de respaldo, como simple elemento disuasivo, evitando así intrusiones o actos vandálicos ante la presencia de una cámara.
El modelo CS705 es similar a una típica cámara full body con lente. De color blanco, dispone de soporte para techo o pared y es apta principalmente para uso en interior. Dispone del LED situado en la parte frontal de la cámara.
El modelo CS914 es similar a una cámara de tipo domo. De color negro, se instala en techos fundamentalmente en interiores, aunque también sirve para uso en exterior bajo techo. Dispone del LED situado en el interior de la carcasa, junto a la lente.
El modelo CS809 es similar a una cámara compacta. De color y aspecto metálico, dispone de carcasa protectora, soporte para techo y pared y LEDs infrarrojos. Su uso está pensado para exterior. Dispone del LED situado en la parte frontal de la cámara.